El Coste De Jugar Mal Al Blackjack
Cada vez que se siente a una mesa para iniciar una sesión de blackjack, ya sea en un casino físico o frente al ordenador, hay dos factores que tienen un enorme impacto en su posibilidad de ganar manos y obtener beneficios constantemente. Esos factores son contar cartas y hacer la jugada correcta. A pesar de que estos factores son tan importantes, a veces hasta los jugadores más disciplinados caen en la tentación de abandonar la estrategia básica y jugar siguiendo corazonadas o «siguiendo su instinto». Hacer tan sólo una mala jugada en una mesa de blackjack puede tener un impacto negativo en toda la sesión.
¿Por qué los jugadores abandonan la estrategia básica?
Todos los jugadores profesionales de blackjack se sientan a jugar con la mejor de sus intenciones pero, a menudo, la realidad se entromete en la mejor de las intenciones. Una verdadera sesión de blackjack casi nunca resulta como uno se la espera debido a todas las variables inherentes al juego. Muchos jugadores no están preparados para que el blackjack les lance una bola curva, y comienzan a desviarse del plan. Una mala racha puede hacer que los jugadores abandonen la estrategia básica. A este punto vamos a retroceder sólo un poco y recordar a todos los lectores que hacer la jugada correcta no garantiza una victoria. Nada puede garantizar una victoria y es por ello que al blackjack se le llama juego. A veces se puede hacer la jugada correcta una y otra vez, y aún así perder una mano o varias manos seguidas. En los juegos de azar, esto se llama una varianza (variance).
La varianza puede simplificarse de esta manera: la varianza representa cómo salen las cosas a largo plazo, hasta el infinito. Sabemos que jugar la estrategia básica del blackjack combinada con el conteo de cartas ofrece una ventaja mínima al jugador sobre el casino. Con fines ilustrativos (y, por favor, entendemos que esto es sólo un ejemplo básico) digamos que su ventaja en la mesa de blackjack se rompe de esta manera: por cada 100 manos que juega el casino ganará 49 y usted ganará 51. Esta ventaja se calcula sobre 100 manos para que el jugador pueda cuantificarla, pero la realidad es que estos números representan su ventaja durante un período de tiempo ilimitado. En un escenario infinito, su ventaja le convertirá en un ganador. El problema es que hay una gran cantidad de tiempo entre una sola sesión y el infinito. Cuando deje de enfocar hacia una sola sesión de blackjack y, en vez de ello, enfoque en su trayectoria general jugando al blackjack, verá que una sola sesión se asemeja a tan sólo un pequeño punto en un radar. Por tanto, podrá perder una sola mano–muchas veces– y aún así ganar en el largo recorrido. De cada 100 manos, 51 victorias, 49 pérdidas. Esas victorias y esas pérdidas pueden llegar en cualquier momento. Esa es la varianza. Es posible perder 15 manos seguidas, ganar tres, perder cuatro más, ganar nueve, etc. Todo lo que se puede saber con certeza es que su ventaja se puede sostener en el tiempo si nos atenemos a la estrategia básica y al conteo de cartas.
Cuando las varianzas negativas aparecen y los jugadores tienen una mala racha, éstos se empiezan a cuestionar su plan. Entonces, deciden que su plan, por alguna razón, no está funcionando en esa ocasión y racionalizan que quizás tienen que adaptarse. A este punto, los jugadores comenzarán a alterar su juego. En lugar de pedir en un 16 contra un 10 del crupier, se plantarán con la esperanza de que la suerte prevalezca. En vez de plantarse con un 12 duro contra un 4 del crupier, doblarán la apuesta. Este es el comienzo del fin para un jugador de blackjack.
Realizar malas jugadas destruye su ventaja
Siempre que ceda a la tentación de abandonar la estrategia básica y jugar como un jugador de blackjack aficionado, habrá alterado significativamente su ventaja global. Habrá cambiado los números. En nuestro ejemplo anterior, se calculó que la ventaja al ganar 51 de 100 manos. A modo de ejemplo, digamos que el abandono de la estrategia básica significa que perderá 51 de 100 manos. Es por este motivo que cuando los jugadores abandonan la estrategia básica, empiezan a perder. Si sigue el plan previsto, las cosas saldrán como es debido y su ventaja se mantendrá. Pero si no lo hace, se habrá colocado en el lado perdedor de la balanza y el casino tendrá la ventaja. Esta es la mentalidad que debe tener en la mesa de blackjack. ¡Recuérdelo bien!
‘Las decisiones son lo que importa, los resultados son irrelevantes.
Gane o pierda, una sola mano no importa a largo plazo. Lo que importa, si desea mantener su ventaja, es si ha hecho o no la jugada correcta. Cada mano es sólo un microcosmos de su carrera en el blackjack. No se preocupe si usted gana o pierde una sola mano. Preocúpese de realizar la jugada correctamente y su ventaja se podrá mantener en el tiempo y le convertirá en un ganador.