Es imposible hablar sobre el blackjack sin mencionar esa parte del mundo donde nació el juego. El Blackjack Europeo es el predecesor del blackjack jugado en los Estados Unidos y otras zonas del mundo. Con el paso de los años, el Blackjack Europeo ha evolucionado hasta algo parecido a la variante estándar de hoy en día, pero todavía hay algunos aspectos del Blackjack Europeo que difieren del blackjack americano. Cualquiera que esté pensando en jugar al blackjack en Europa, debería conocer estas diferencias en las reglas antes probar suerte.
La Historia Del Blackjack Europeo
Como hemos dicho, el blackjack nació en Europa. Aunque los orígenes exactos del juego son desconocidos, la primera referencia escrita al blackjack se puede encontrar en la obra de Miguel de Cervantes, famoso por su aclamado Don Quijote de La Mancha. El autor era un jugador y en una de sus novelas narra la historia de dos jugadores de cartas muy hábiles haciendo trampas en el juego del 21. Teniendo en cuenta que esta novela fue escrita entre los años 1601 y 1602, podemos establecer con éxito que el blackjack ya se jugaba en España en esa fecha tan temprana. Sin embargo, fueron los franceses y los alemanes quienes realmente popularizaron el formato original del juego. En estos países se le llamaba Vingt-et-un, y el juego fue muy popular durante los siglos XVIII y XIX. Todos los jugadores modernos tenemos una deuda de gratitud con estas culturas por crear la base de las reglas del blackjack actual.
El Blackjack Europeo Moderno
A día de hoy, el blackjack sigue siendo un juego muy popular en los países europeos, pero las reglas del Blackjack Europeo han retenido algunos de los aspectos originales del juego. Estas son las reglas básicas del Blackjack Europeo:
Como puede comprobar, algunas de las reglas del Blackjack Europeo son las mimas que en el blackjack americano, pero aquellas reglas que son diferentes tienen un gran impacto en el juego y la estrategia. Veámoslas con más detalle.
Volver A Barajar En El Blackjack Europeo
En el Blackjack Europeo se utilizan ocho mazos de cartas. Además, los ocho mazos se barajan después de cada ronda del juego. Esto es una pesadilla para los contadores de cartas, porque hace prácticamente imposible el conteo. Para barajar tras cada ronda, se utiliza un barajador automático similar a los utilizados en las mesas de póquer en el casino. Es muy difícil llevar un conteo en el Blackjack Europeo porque nunca hay suficientes cartas repartidas en una sola ronda de juego, las cuales permitan establecer una estimación precisa sobre si el mazo es favorable o desfavorable para el jugador.
En El Blackjack Europeo No Se Pueden Dividir Los 4, 5 Y 10
Esta regla no es muy importante para los jugadores profesionales de blackjack y los contadores de cartas, porque estos pares de cartas casi nunca se separan. Sin embargo, sabemos que cuando un casino establece una regla en el blackjack, siempre lo hace en su beneficio. Los casinos europeos saben que los contadores de cartas expertos a veces dividen estos pares cuando la mano del crupier es débil y, posiblemente, está a punto de pasarse. Este es un elemento más del Blackjack Europeo estrictamente diseñado para frustrar a los contadores de cartas profesionales.
En El Blackjack Europeo No Se Puede Echar Un Vistazo A Las Cartas
Tal vez la diferencia más importante en las reglas del Blackjack Europeo es aquella que prohíbe al crupier mirar su carta oculta hasta después de que hayan actuado todos los jugadores en sus manos. Esto significa que el crupier no comprobará si tiene un blackjack hasta que se hayan tomado todas las decisiones. ¿Por qué la regla de no mirar la carta es tan importante? En el blackjack americano, un blackjack del crupier se revela de inmediato y todos los jugadores en la mesa sin su propio blackjack pierden su apuesta. No se les da la oportunidad de doblar o dividir. En el Blackjack Europeo un jugador debe llevar a cabo una de las opciones disponible, lo cual implica un aumento de la apuesta original, sin saber si el crupier revelará un blackjack. Como se puede ver, esta situación da una gran ventaja al casino. También es imposible recoger cualquier “señal” del crupier porque éste no sabe si sus cartas son iguales a un blackjack. Por estas razones, jugar al blackjack de manera profesional resulta mucho más beneficioso en los Estados Unidos y en otras zonas del mundo donde se siguen las normas del blackjack estándar.